Sociales
La fotografía social juega un papel fundamental en la preservación de momentos significativos en la vida de las personas. Eventos como bodas, bautizos y fiestas de quince años son hitos que marcan etapas importantes en la historia personal y familiar. A través de la fotografía, se capturan emociones, sonrisas y detalles que, de otra manera, podrían desvanecerse con el tiempo. Estas imágenes se convierten en recuerdos tangibles que se transmiten de generación en generación, permitiendo que las futuras generaciones revivan la alegría y la emoción de esos días especiales. Además, la fotografía social fortalece los lazos familiares y de amistad, al documentar no solo el evento en sí, sino también las interacciones y conexiones que enriquecen nuestra vida. En definitiva, es una herramienta indispensable para contar nuestra historia y valorar las tradiciones que nos unen.







































